2ª Escuela de Marxismo Ciclo "El régimen del 78"

Comenzamos la primera de las entregas del ciclo dedicado a conocer cómo se forjó eso que llaman “el régimen del 78” afirmando que “esta no es una escuela de Historia. No tiene por objeto comprender el pasado, sino conocer las claves del presente, para poder transformarlo”.

Y comprobamos hasta que punto las mentiras y falsedades sobre el pasado sirven para esconder las verdades más importantes del presente.

Si se nos ofrece una distorsionada visión sobre el régimen fascista, concentrada en la figura de un dictador casi unipersonal, es para ocultar las clases que lo sostuvieron y se beneficiaron de su régimen. Las mismas que hoy dominan el país. Si en la actualidad el Banco de Santander es la cabeza de la gran banca, fue gracias a que la hiperexplotación impuesta por el fascismo le permitió pasar de ser una entidad de provincias en 1939 a incrustarse en el selecto club de “los siete grandes bancos” en los años sesenta.

Si se limita la “herencia del franquismo” a jueces o militares reaccionarios, es para borrar de nuestra conciencia que en 1953 se entregó el país a EEUU. Los falangistas han desparecido, pero las bases norteamericanas siguen funcionando a pleno rendimiento.

Y nos dan a elegir entre “versiones oficiales” sobre la transición, una “de derechas” y otra “de izquierdas”… que ocultan, ambas, en qué consistió realmente y quien la dirigió.

La sustancia de la transición, aquella cuyas consecuencias determinan lo que sucede hoy en España, no fue “la llegada de la democracia”, sino que el cambio de régimen fortaleciera el poder de quienes ya lo controlaban.

Y quien pilotó la transición, tal y como planteaba, ya en 1978, la línea del Iª Congreso de Unificación Comunista de España, fue “el sector hegemónico de la oligarquía financiera, ligado por estrechos vínculos económicos al imperialismo norteamericano y bajo la orientación política y apoyo de su Estado Mayor (el Pentágono)”.

De 1974 a 1978, desde el asesinato de Carrero Blanco a la aprobación de la Constitución, ese proyecto de cambio de régimen se consuma. Lo que sucede en estos menos de cuatro años, que estudiaremos en esta Escuela, va a determinar todo lo que sucederá en las próximas décadas, hasta la actualidad.

Es entonces cuando se impone un marco económico al servicio del capital extranjero y los grandes nódulos oligárquicos. Plasmado en dos hechos. En 1975 el capital extranjero controlaba el 13% de las acciones de las grandes empresas españolas en 1975, hoy posee más del 50%. En 1976 los salarios suponían en España el 68% del PIB, hoy este porcentaje se ha reducido al 47%.

Y es en estos años que se levanta un modelo político, plasmado en la Constitución, que liquida a toda la casta franquista… para sustituirla por otra donde el control de la superpotencia o de la gran banca sea mayor.

Pero no todo estaba “atado y bien atado”, y EEUU o la oligarquía española no fueron los únicos protagonistas de la transición. Ésta se realizó bajo la influencia del mayor movimiento de masas en la historia de una dictadura. Una lucha popular, extraordinariamente organizada y radicalizada, en crecimiento y capaz de obtener importantes victorias, como obligar a los últimos gobiernos franquistas a eliminar el despido libre o conceder subidas salariales por encima del 25%.

Quieren borrar de nuestra memoria el papel del pueblo, reduciendo la transición a un pacto, que unos apoyan y otros critican, entre “las élites del franquismo y de la oposición democrática”. La realidad es que, tan y como plantea nuestra línea “los protagonistas de la crisis del fascismo, el auténtico “motor del cambio”, han sido las masas populares, sus luchas, su combatividad, lo han puesto en quiebra definitiva, han llevado a la oligarquía al convencimiento de la necesidad de pasar del “terror al engaño”. Es el pueblo, su voluntad decidida de conquistar la libertad, el que en todo el proceso ha empujado siempre mucho más lejos de lo previsto inicialmente por los “programadores” de la sustitución”.

Y vamos a estudiar como sin el papel decisivo de las direcciones del PCE y el PSOE en que la transición se saldara de forma favorable a los intereses de la superpotencia norteamericana o la gran banca española.

La aguda lucha de clases durante estos cuatro años, de 1974 a 1978, va a configurar el “régimen del 78” y asentar los cimientos de la España actual.

La cuarta Escuela de Marxismo de 2021 se celebrará el viernes 23 y sábado 24 de abril.

La Escuela se desarrollará por vía telemática, atendiendo a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, tiene una matrícula de 6 euros, y cada matriculado recibirá un dossier de textos.