La dictadura del proletariado

Se que mucha gente al leer la palabra “dictadura” la asocia automáticamente a las criminales dictaduras de Franco, Pinochet o Videla, o cualquier otra que haya existido; por eso creo que antes de hablar propiamente de la “dictadura del proletariado” tenemos que tratar la concepción marxista del estado.

El concepto de estado

El concepto de estado ha sido objeto de fuertes debates y rupturas en el seno del movimiento revolucionario. Para Marx el estado es fruto del carácter irreconciliable de los intereses de clase. Es decir, ante dos intereses de clases antagónicos (como pueden ser los de esclavistas y los de esclavos, los de feudales y de los siervos, o de los capitalistas y los proletarios) solo cabe crear un conjunto de aparatos (legislativo, judicial, represivo) que permite a una o varias clases someter al resto a su dominio. Por tanto la concepción marxista del estado es que siempre tiene dos caras, plena democracia y libertades para la clase o clases dominantes y opresión / dictadura contra las clases dominadas.

Este concepto del estado choca contra la concepción de anarquistas y socialistas utópicos que creen que cualquier estado es malo porque el poder genera corrupción, o con el de los socialdemócratas que creen que el estado es neutral y por tanto puede servir a unas u otras clases, o con el concepto del revisionismo contemporáneo que surgió en la Unión Soviética que creía que las clases habían desaparecido y el estado representaba al conjunto del pueblo.

Democracia para quién, dictadura para quien

Partiendo de este concepto marxista del estado, lo que supone la dictadura del proletariado es lo que coloquialmente llamamos “darle la vuelta a la tortilla”. Y en concreto en nuestro país no seria una dictadura exclusiva del proletariado, sino del proletariado y el resto de clases populares (semi-proletariado, pequeña y mediana burguesía, campesinado, etc..). Es decir las clases dominantes pasarían a ser las que hoy son oprimidas y la única clase oprimida sería la oligarquía monopolista y sus aliados imperialistas. Sobre ellos se ejercería un férreo control, porque sabemos que con el poder y medios económicos que tienen intentaran volver a establecerse como clase dominante.

Así pues, con dictadura del proletariado nos referimos a un régimen que respete las máximas libertades, tanto individuales como colectivas. Que ejerza una labor de redistribución de la riqueza para evitar que ésta se acumule en pocas manos, ofreciendo unos servicios sociales de calidad y ayudando a recuperación económica del país, pero no apoyando a los grandes monopolios sino a la pequeña y mediana empresa y autónomos, que son además los que mas empleo generan.

Y si hay varias clases en el poder, ¿porque la llamamos “del proletariado”?

Aunque hay otras clases que están hoy en día oprimidas por la oligarquía, sus objetivos no son acabar con la explotación del hombre por el hombre, el objetivo de la pequeña y mediana burguesía seria volver atrás en el tiempo (cosa imposible) y regresar a un capitalismo de libre competencia como el que existía en tiempos de Marx.

Por ello, solo los intereses del proletariado son los que deben presidir este régimen. Porque el proletariado no busca imponer su modo de producción y mantenerse indefinidamente en el poder como han hecho el resto de clases históricamente, sino que pretende que tras una etapa de socialismo donde se realizarían importantes transformaciones, llegar a una sociedad nueva, una sociedad comunista, sin clases sociales, donde ni siguiera sería necesaria la existencia del estado como herramienta de dominación, y que se regiría por la premisa “a cada cual según sus necesidades, y de cada cual según sus capacidades”.